El test genético preimplantacional

¿Qué es?

El test genético preimplantacional es un tratamiento de reproducción asistida que, junto con la fecundación in vitro, permite seleccionar embriones en base a su estatus cromosómico y/o genético, aumentando la posibilidad de embarazo y disminuyendo la transmisión de enfermedades genéticas que porten los progenitores.

Se realiza en el laboratorio de FIV en colaboración con el laboratorio de genética molecular, y consiste en estudiar una o varias células del embrión obtenidas mediante biopsia, en un momento concreto de su desarrollo, con los siguientes objetivos:

1. Buscar el equilibrio de los cromosomas del embrión, es decir su ploidía.
2. Buscar un gen concreto, portado por alguno de los progenitores y responsable de una enfermedad monogénica grave. En este caso, previo a la realización de la biopsia embrionaria, hay que realizar un estudio de informatividad que nos advertirá sobre la posibilidad de realizar el estudio, posteriormente, en el embrión.

¿En qué consiste el test genético preimplantacional?

El test genético preimplantacional consta de varios pasos:

Fecundación in vitro, biopsia embrionaria, estudio genético del material extraído en la biopsia a cada embrión y crio preservación de los embriones hasta la obtención del resultado del laboratorio de genética.

Una vez obtenido el diagnóstico en cada embrión, se realizará la crio transferencia del embrión transferible al útero de la mujer.

Es un procedimiento complejo que implica a todo el personal de una unidad de reproducción asistida, así como al personal de genética molecular del laboratorio de genética.

¿A quién va dirigido?

Este tratamiento esta dirigido a mujeres mayores de 38 años, fallos repetidos de implantación, abortos de causa desconocida y de causa cromosómica, mujeres con gestaciones anteriores con alteraciones cromosómicas, varones con alteración de la meiosis en sus espermatozoides, parejas portadoras de anomalías cromosómicas y/o genéticas diagnosticadas.